Después de una larga jornada de trabajo es comprensible todo el estres acumulado durante el día e incluso durante la semana. para liberar tanta tensión mucha gente agrede a otras personas, yo he sido testigo muchas veces de esto, por ejemplo, en la mañana cuando me dirijo a la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales a las seis de la mañana aproximadamente el metro ya va suficientemente atascado! , la gente se empuja para poder entrar e incluso se meten por las ventanas.
Los últimos carriles regularmente se reservan para las mujeres, yo los he abordado y haciendo una comparación la situación es la misma. he visto como señoras golpean a otras con paraguas, o como arrojan desde la entrada sus bolsas hacia un asiento lejano para apartar lugar y no permitir que otras mujeres se sienten. El jalón de cabellos tampoco puede faltar entre mujeres, así como pellizcos y codazos.
Es entendible por una parte que todas llevamos prisa y queremos llegar a nuestro destino, pero no podemos dar pie a la ira en contra de otras personas ya que la violencia genera más violencia.
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